¡¡A LAS 11 EN UNAMUNO!!
22:00 del 07.04.05. Kinito o no kinito? Llueve, ya es tarde para decidir, mañana de empalmada, la gente se empieza a rajar... El plan del jueves estaba de capa caída. Si dudábamos entre salir y no es que algo de ganas había. Gran frase: "a las 11 de unamuno!". Y ale, para allá.
Juanjo y yo, los primeros en llegar. Poco después apareció Pilar, sin duchar. Plissken llegó lleno de energía. Y por último Ander, del que hay mucho que contar.
Empezamos la noche en Los Amigos, qué mejor que un kinito para 5 personas con una jauaja en el cuerpo semejante. Allí nos juntamos con unas ya casi borrachas Amaia, Kattalin y Marta, de a resi, y comenzamos a jugar al señor del 3. Cuando Pili cogía el dado no había dios que se lo quitara de las manos, daba miedo sobre todo cuando le tocaba mandar beber a los demás; que se lo pregunten a Ander y a Alberto, que yo creo que aún tienen esa cara de venganza puesta... jojo. Las chicas de Unamuno no tardaron en arrancarse por bulerías, y el resto del bar a veces las seguía. No tardaron mucho en empezar a echarnos, pero casi necesitan una grúa para movernos de allí a Pili y a mí. Ese Katxi! Salimos de allí tirando a pedo, pero aún quedaba mucha noche por delante...
De allí al Ikatz-Borda, donde se concentraba la masa unamunense. Ander, Pili, Alberto y yo nos quedamos en el cuartillo ese de dentro debatiendo sobre política, aunque no conseguimos arreglar el mundo. Los de la resi iban y venían, había un buen ambientillo. Pili se enamoró de Evaristo el de la Polla, pero era sólo un videoclip y se desilusionó. Bebimos más, y terminamos ya poniéndonos pedo.
Luego, camino de Barrenka. Bares de nombres que nunca me aprenderé hasta que nos apalancamos en el Santuario. Echamos unos bailes (siempre con el vasito en la cabeza) y bebimos más y más... El camarero nos invitó a un patxarán porque se equivocó y oye, me vino de pistón.
Por fin, camino al Antzoki (mi bar especial). Del camino la verdad es que no recuerdo mucho, no sé si pasó algo especial. Entramos y no había mucha gente, un jueves más bien flojo. Pero casi lo prefiero así, porque a parte de que conocía casi casi a todo el bar, había mogollón de sitio para hacer el lerdo. Continuamos bebiendo, y al poco rato me encontré con un amigo (...). El bar estaba más lleno, mis amigos más borrachos, y yo de puta madre. Me gustó conocer a todo el mundo pa charrar sin parar. Volví a subir donde el Dj y estuve allí fumando y haciendo el lerdo un rato. Me lo pasé de cojón. Juanjo cada vez estaba peor, y los demás no nos quitábamos el vaso de la cabeza. Me lo pasé way.
Luego fuimos al Azkena, donde fuimos partícipes de la Pasión de Juanjo en directo. Ya por el camino se entretuvo cogiendo en volandas a todos el mundo (todo), y luego pilló por ahí un montículo de cartones y ale, a tirarse en plancha. De ahí el apodo que luego le pusieron "el cartones". Se tiró por el suelo ni lo sé de veces, se tumbó en las escaleras... Un verdadero despojo humano, pero muy gracioso. Hizo que los demás nos sintiéramos como en el cine. Alberto y yo bajo las escaleras, Pilar y él arriba... parecía un verdadero videoclip de El Informal.
Por último estuvimos de charrada en la puerta del Azkena Ander, Alberto, Pili y esa chica de Burgos que tan bien parecía caer a mis amigos, jojo. A Pili y a mí nos quedó claro que los de Bilbao también controlan el euskera, o eso parece. Dilemas con esa chica... Este Ander...
Y poco más, acompañamos un poco a Pili y los otros tres (Juanjo desapareció) fuimos camino al metro hablando de amor-sexo y sus diferencias. Y ale, cada mochuelo a su olivo.
Llegué y aún me metí un ratico en la habitación de la Katalina a charrar una miajeta y ale, hasta hace poco que he amanecido con una cara de meurto del horror...
Juanjo y yo, los primeros en llegar. Poco después apareció Pilar, sin duchar. Plissken llegó lleno de energía. Y por último Ander, del que hay mucho que contar.
Empezamos la noche en Los Amigos, qué mejor que un kinito para 5 personas con una jauaja en el cuerpo semejante. Allí nos juntamos con unas ya casi borrachas Amaia, Kattalin y Marta, de a resi, y comenzamos a jugar al señor del 3. Cuando Pili cogía el dado no había dios que se lo quitara de las manos, daba miedo sobre todo cuando le tocaba mandar beber a los demás; que se lo pregunten a Ander y a Alberto, que yo creo que aún tienen esa cara de venganza puesta... jojo. Las chicas de Unamuno no tardaron en arrancarse por bulerías, y el resto del bar a veces las seguía. No tardaron mucho en empezar a echarnos, pero casi necesitan una grúa para movernos de allí a Pili y a mí. Ese Katxi! Salimos de allí tirando a pedo, pero aún quedaba mucha noche por delante...
De allí al Ikatz-Borda, donde se concentraba la masa unamunense. Ander, Pili, Alberto y yo nos quedamos en el cuartillo ese de dentro debatiendo sobre política, aunque no conseguimos arreglar el mundo. Los de la resi iban y venían, había un buen ambientillo. Pili se enamoró de Evaristo el de la Polla, pero era sólo un videoclip y se desilusionó. Bebimos más, y terminamos ya poniéndonos pedo.
Luego, camino de Barrenka. Bares de nombres que nunca me aprenderé hasta que nos apalancamos en el Santuario. Echamos unos bailes (siempre con el vasito en la cabeza) y bebimos más y más... El camarero nos invitó a un patxarán porque se equivocó y oye, me vino de pistón.
Por fin, camino al Antzoki (mi bar especial). Del camino la verdad es que no recuerdo mucho, no sé si pasó algo especial. Entramos y no había mucha gente, un jueves más bien flojo. Pero casi lo prefiero así, porque a parte de que conocía casi casi a todo el bar, había mogollón de sitio para hacer el lerdo. Continuamos bebiendo, y al poco rato me encontré con un amigo (...). El bar estaba más lleno, mis amigos más borrachos, y yo de puta madre. Me gustó conocer a todo el mundo pa charrar sin parar. Volví a subir donde el Dj y estuve allí fumando y haciendo el lerdo un rato. Me lo pasé de cojón. Juanjo cada vez estaba peor, y los demás no nos quitábamos el vaso de la cabeza. Me lo pasé way.
Luego fuimos al Azkena, donde fuimos partícipes de la Pasión de Juanjo en directo. Ya por el camino se entretuvo cogiendo en volandas a todos el mundo (todo), y luego pilló por ahí un montículo de cartones y ale, a tirarse en plancha. De ahí el apodo que luego le pusieron "el cartones". Se tiró por el suelo ni lo sé de veces, se tumbó en las escaleras... Un verdadero despojo humano, pero muy gracioso. Hizo que los demás nos sintiéramos como en el cine. Alberto y yo bajo las escaleras, Pilar y él arriba... parecía un verdadero videoclip de El Informal.
Por último estuvimos de charrada en la puerta del Azkena Ander, Alberto, Pili y esa chica de Burgos que tan bien parecía caer a mis amigos, jojo. A Pili y a mí nos quedó claro que los de Bilbao también controlan el euskera, o eso parece. Dilemas con esa chica... Este Ander...
Y poco más, acompañamos un poco a Pili y los otros tres (Juanjo desapareció) fuimos camino al metro hablando de amor-sexo y sus diferencias. Y ale, cada mochuelo a su olivo.
Llegué y aún me metí un ratico en la habitación de la Katalina a charrar una miajeta y ale, hasta hace poco que he amanecido con una cara de meurto del horror...
5 comentarios
YO -
Ander se lo perdió...
Ah! Y del momento Bollo- Aga de camino del Azkena yo no me acordaba! muy bueno... jojojo!
Egunon -
ander -
Lo mejor de la noche para mí fue el ataque de risa de Kattalin, nunca había visto nada igual se le oía por todo el bar!!!
Haber hoy qué tal, para pribar he pillado vino rosado a pelo (idea de un amigo).
Espero veros por ahí.
larlar -
pilarrr -